Charlotte con mousse de fresas

El otro día, con la idea de aprovechar unos bizcochitos que me quedaban, se me ocurrió hacer una charlotte (o charlota), un postre frío muy popular en la corte rusa del siglo XVIII (donde dicen que se inventó). La receta que había visto llevaba una crema de almendras como relleno, pero a mí me apetecía más usar las ricas fresas que ahora empiezan a verse por las tiendas. Así que decidí hacer un mousse de fresas, que es más ligero, y decorarla luego con fresas cortadas. Un postre que luce mucho y es de temporada, pero con el que se puede hacer mucho más. Podemos rellenarlo con crema de otras frutas, o la mencionada crema de almendras, mousse de chocolate... O podemos hacer una versión en caliente con manzana (la clásica apple charlote). No será la última vez que nos veamos, Charlota. :)

¡Buen finde!

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Ingredientes

Bizcochos de soletilla (unos 30)

1 cucharada de Cointreau diluida en 3 cuch. de agua

250 g de fresas (más unas 6–8 fresas para decorar)

1/2 taza de azúcar glas

1 1/4 tazas de nata para montar

{gelatina}

Preparación

1. Lo más importante para este postre es tener un molde desmoldable. Supongo que se puede hacer sin este, pero al desmoldar se nos puede romper, así que no lo recomiendo.

2. Triturar las fresas con el azúcar. Si queréis podéis echarle al puré algo de gelatina para que el mousse quede más denso. {A mí la gelatina no me va mucho, pero en este caso el relleno puede quedar mejor; a mí me quedó un poco blandito.}

3. Montar la nata bien espesa. Añadirle el puré de fresas mezclando con cuidado con una cuchara, intentando que no se baje demasiado la nata. Meter en la nevera mientras continuamos.

4. Preparar el Cointreau con agua en un plato hondo. Lo usaremos para remojar cada bizcocho a medias antes de ponerlo en el molde. No deben quedar blandongos, sólo empapados a la mitad.
5. Cubrir la base del molde con bizcochos ya empapados. Aseguraos de que no queden huecos en la base (hay que cortar los bizcochos como queden mejor para poder rellenarla). Cortar unos 6 bizcochos por la mitad o al tamaño que quede bien para completar el borde del molde.

6. Una vez tengamos la base y el borde hechos, se echa una capa de mousse de fresas (la mitad) sobre el fondo. Ponemos otra capa de bizcochos y volvemos a echar el resto del mousse hasta arriba.

7. Refrigerar al menos 8 horas, aunque está más bueno un día después. ;)

8. Cuando vayamos a servirlo, cortar unas fresas y decorar la parte de arriba del pastel. Desmoldar con cuidado de que no se peguen los bizcochos laterales... ¡y a disfrutar!